sábado, 7 de mayo de 2011

COMO AFRONTAR SITUACIONES DIFICILES

No es nuevo, que en la vida en diferentes momentos nos vamos a encontrar con situaciones complicadas. Pero un afrontamiento adecuado de éstas situaciones u obstáculos, nos permitirán madurar y desarrollar nuevas herramientas para afrontar cada vez mejor la exposición a nuevas situaciones de este tipo.
Cuando aparece un problema, generalmente no estamos seguros de cómo afrontarlo, porque generalmente, éste es percibido de formas distintas por las personas involucradas en él.
Además, aunque nos pueda resultar incómodo aceptarlo, la mayoría de las veces nos resulta más fácil conformarnos con nuestra propia percepción del problema, antes que ponernos en la piel de los demás, evitando así el malestar que nos pueda generar, por no decir, que muchas veces para evitar dicho malestar, ignoramos el problema hasta que llega un punto, en el que no hay más remedio que afrontarlo.
Todo problema interpersonal es un conflicto y lo importante es reconocer que nosotros somos parte de ese conflicto, por lo que de algún modo contribuiremos para que éste surja, continúe o desaparezca. Por lo tanto, somos capaces de contribuir a su solución. Pero a la hora de diseñar alternativas, consciente o inconscientemente buscamos lo cómodo, lo que menos esfuerzo, implicación emocional o malestar nos genere, sesgando así la elección de la alternativa adecuada.
Algunas preguntas que debemos hacernos para evitar este sesgo son;
¿Es la más viable?
¿Es la más práctica?
¿Es la que tendrá mayores probabilidades de éxito?
¿Es la más justa para todas las partes involucradas?
¿Es realmente ese el problema, o es la consecuencia de otro que hay otro de fondo?

Hay diferentes estilos o estrategias de afrontamiento;
1.     Afrontamiento productivo o dirigido a la resolución del problema:
-Buscar actividades relajantes.
-Esforzarse.
-Concentrarse en lo positivo.
-Concentrarse en resolver el problema.
-Buscar pequeños momentos de distracción.

2.    Afrontamiento en relación con los demás:
-Buscar apoyo en amigos, familia, etc…
-Buscar ayuda profesional.
-Buscar pertenencia.

3.    Afrontamiento improductivo:
-Autoinculparse.
-Ignorar el problema.
-Falta de afrontamiento.
-Reservarlo para sí.
-Preocuparse y no ocuparse.
-Escapar

Se ha demostrado que los hombres en general tienden más a buscar momentos de distracción, ignorar el problema y reservarlo para sí. Mientras que las mujeres, buscan actividades relajantes, se concentran en lo positivo y dirigen sus esfuerzos a resolver el problema.
Esto ha de ser tenido en cuenta en cualquier situación o problema en la que estén involucrados ambos géneros. El tiempo dicen que lo cura todo, pero hasta día de hoy que creo que no resuelve los problemas, es más creo que los enferma aún más.


miércoles, 4 de mayo de 2011

¿SE PUEDE SUPERAR UNA INFIDELIDAD?


Una infidelidad en una pareja es un síntoma de que algo o alguien no marcha bien.
Pero las infidelidades solo destruyen las malas relaciones, demasiado débiles o desgastadas.
A las basadas en el amor, las refuerzan  y producen madurez psicológica, siempre y cuando se afronten de una forma adecuada. Hablando, claro está, de infidelidades puntuales y no de una relación basada en el engaño constante.

Cuando una persona es engañada por su pareja, sufre tres heridas;
1.     Dolor por el abandono (celos, inseguridad..)
2.    Humillación (narcisismo y autoestima heridos)
3.    Rabia

La progresiva cicatrización de estas heridas, exige vivenciar el siguiente proceso;
1.     Expresar las emociones ocasionadas, (con amigos, familiares…).
2.    Afrontar con coraje que es lo qué ha pasado e investigar ambos miembros de la pareja cuál fue el significado, (una huida, un narcótico, un castigo o venganza, una muestra de soledad, un síntoma de aburrimiento o tristeza…).
3.    Resolver a fondo todos los problemas descubiertos, (narcisismo, depresión, ansiedad, dependencia, falta de autoestima…).

De esta forma, si ambos miembros de la pareja se aman y son lo suficientemente maduros psicológicamente, podrán recorrer juntos todas estas etapas, con o sin ayuda profesional, y fortalecer todavía más esa relación.
Las heridas del engañado cicatrizaran, la confianza volverá y el sentimiento de culpa y posteriormente de vergüenza del infiel desaparecerá. Pudiendo llegar a ser la relación incluso más solida que antes de la infidelidad.

Pero, si por el contrario, estos procesos no son llevados a cabo de una forma adecuada y se pone distancia entre ambos miembros, para que el conflicto se resuelva solo y los sentimientos desaparezcan con el tiempo, es decir, si en lugar de afrontar lo que ha sucedido, escapamos o evitamos hablar de ello, entonces el conflicto mutuo seguirá abierto durante mucho tiempo y podrá llevar incluso a la ruptura definitiva.